El Pleno del Consejo Constitucional ha dado inicio a una importante etapa en la revisión de la propuesta de Constitución al abordar el Capítulo I sobre los “Fundamentos del Orden Constitucional”. En este contexto, se ha generado un debate relevante en torno al inciso 1 del artículo 1, que sostenía que “todo ser humano es persona”. Este punto específico provocó una división de opiniones, con la abstención de cuatro consejeros del bloque de Chile Vamos, quienes demostraron su compromiso con los valores tradicionales de la derecha chilena.
El texto original establecía que “la dignidad humana es inviolable y la base del derecho y la justicia. Todo ser humano es persona. Las personas son libres e iguales en dignidad y derechos. Su respeto y garantía es el primer deber de la comunidad política y de su forma jurídica de organización”.
Finalmente, después de un intenso debate, este inciso fue rechazado con 29 votos a favor, 17 en contra y 4 abstenciones. La derecha chilena demostró su compromiso con valores tradicionales y fundamentales.
En contraste, se aprobó por 50 votos a favor el inciso 1 del anteproyecto que establece: “La dignidad humana es inviolable y la base del derecho y la justicia. Las personas nacen libres e iguales en dignidad y derechos. Su respeto y garantía es el primer deber de la comunidad política y de su forma jurídica de organización”.
Además, con un respaldo de 34 votos y 16 abstenciones del oficialismo, se aprobó el inciso 2 del artículo 1 propuesto por la comisión, que establece que “la familia es el núcleo fundamental de la sociedad. Es deber del Estado y la sociedad dar protección a las familias y propender a su fortalecimiento”.
En esta misma línea, se ratificó por 33 votos a favor de la oposición el inciso 1 del artículo 4 que señala que “el Estado de Chile adopta para su gobierno la república democrática, con separación de poderes y régimen presidencial. La soberanía reside en el Pueblo de Chile, Nación única e indivisible, y se ejerce por este a través de elecciones periódicas, plebiscitos y de las autoridades que esta Constitución establece. Ningún sector del pueblo, persona, institución o grupo puede atribuirse su ejercicio”.
En resumen, esta sesión del Pleno del Consejo Constitucional ha dejado clara la posición de la derecha chilena al rechazar un inciso que consideraba controvertido y al defender sus valores y principios en la propuesta constitucional.
