La Concejal Quenne Aitken ha expresado su creciente preocupación por la inestabilidad laboral que afecta a los empleados municipales, destacando una serie de discrepancias preocupantes entre lo prometido en el presupuesto municipal del año pasado y la realidad actual.
Aitken ha señalado que, en lugar de los contratos anuales anunciados, se están realizando contratos parcializados, lo que no solo pone en peligro la estabilidad emocional de los trabajadores, sino que también compromete sus períodos de descanso. Algunos empleados, incluso, han perdido días de vacaciones debido a esta práctica.
Además de la incertidumbre laboral, Aitken ha planteado serias dudas sobre la transparencia en los procesos de contratación municipal. Ha cuestionado la idoneidad de algunos concursos, como el requisito aparentemente incongruente de ser titulado profesor para ocupar roles administrativos dentro del municipio. Esta falta de claridad y coherencia en los procesos de selección levanta preocupaciones legítimas sobre la equidad y la justicia en la contratación de personal municipal.
La preocupación de Aitken también se extiende a la falta de información sobre los sumarios municipales, particularmente aquellos relacionados con casos sensibles de acoso sexual y laboral. Las respuestas evasivas del departamento jurídico, que simplemente se amparan en la confidencialidad de los sumarios sin ofrecer soluciones concretas, han aumentado la inquietud y la frustración en la comunidad.
En respuesta a estas preocupaciones, el Concejo Municipal está exigiendo explicaciones detalladas y transparencia por parte de la Administración Municipal. Se espera que este llamado a la rendición de cuentas conduzca a medidas concretas para abordar las irregularidades señaladas y, en última instancia, para restaurar la confianza en la gestión municipal.