En su exposición del pasado lunes, el consejero republicano, Luis Silva, brindó argumentos sólidos para respaldar la propuesta de contar con 138 escaños en la Cámara de Diputadas y Diputados. Durante su discurso, Silva utilizó un ejemplo llamativo: la velocidad máxima en carretera, para ilustrar la naturaleza de la política y la discrecionalidad que la caracteriza.
La Discrecionalidad en la Política:
En un discurso que buscaba explicar la composición de la nueva Cámara de Diputados con 138 escaños, el consejero y vocero republicano, Luis Silva, destacó la idea de discrecionalidad en la política. Señaló que esta discrecionalidad permite a los líderes elegir entre múltiples opciones razonables, sin necesariamente optar por la más lógica, pero sí por una que sea razonable. En sus palabras, “Es decir, la posibilidad de adoptar una de muchas opciones razonables. Una, no la más razonable. Una que sea razonable. Y punto”.
La Controversia de los 138 Diputados:
Silva abordó la controversia en torno a la cifra de 138 diputados, haciendo hincapié en que esta elección no excluye otras formas racionales de configurar la Cámara de Diputados. Argumentó que, al igual que en la política, existen numerosos números en nuestro derecho y gobierno que se pueden justificar racionalmente, sin que uno sea la única opción lógica. En este contexto, cuestionó ejemplos comunes, como la velocidad máxima en carretera, señalando: “¿Por qué 120 km/hr es la velocidad máxima en carretera? ¿Por qué 50 km/hr es la velocidad máxima en zona urbana? ¿Por qué son 21 ministros de la Corte Suprema?”.
La Variedad de Guarismos:
El consejero continuó su discurso destacando que la sociedad convive con diversos guarismos que a menudo se aceptan sin cuestionar. Afirmó que es posible justificar racionalmente muchos números, sin que uno sea el único válido. “Podríamos seguir indagando en la cantidad de números que llenan nuestro derecho y que se pueden justificar racionalmente, sin concluir que es el único que puede justificarse racionalmente”, concluyó Silva.
La exposición de Luis Silva no solo defendió la propuesta de 138 diputados, sino que también planteó una reflexión profunda sobre la naturaleza de la política y la elección de números en el sistema gubernamental, resaltando la importancia de la discrecionalidad y la diversidad de opciones razonables.