A eso de la medianoche del miércoles, desconocidos robaron armas y cartuchos desde un cuartel de Carabineros en Macul, región Metropolitana.
La situación ocurrió a eso de las 00:20 de esta jornada, en la 46ª Comisaría de Macul, ubicada en avenida Quilín, a la altura del 1.500. Un cabo primero que se encontraba en servicio de guardia en el recinto policial, recibió una llamada: al otro lado del teléfono se identificó un coronel, que habría sido el jefe del departamento L-2 de la policía uniformada local.
La orden que recibió tan tarde y tan poco nítida dada las circunstancias propias de la comunicación móvil y a distancia fue que fuera hasta su oficina (la de Gómez) y sacara diferentes especies: en particular, dos armas, marca Taurus, y 35 cartuchos calibre 9×19 mm. “Después los paso a buscar”, podría haberle dicho.
Y efectivamente, minutos más tarde llegaron hasta la Comisaría dos vehículos, de los cuales bajó un desconocido, el que finalmente se llevó la caja fuerte con las armas y las municiones.
Carabineros investigan el delito de hurto agravado desde cuartel de la policía uniformada. El cabo primero Delgado recuerda eso, pero según contó en el testimonio, no recuerda los números de serie.
El fiscal Alfredo Villagrán Godoy, de la Primera Fiscalía Militar de Santiago, instruyó a la sección OS9 de Carabineros a realizar las primeras indagatorias.
Desde la institución
Desde Carabineros contaron que tanto el coronel como el cabo primero participan en calidad de víctima de las indagatorias.
“A lo menos, se recibe un llamado telefónico, se pide que saquen algunas especies y son entregadas a un desconocido en un automóvil. Las dos armas son armas particulares. No hay elementos fiscales que hayan sido sustraídos”, dijo el director de Orden y Seguridad de Carabineros, general Enrique Monras.
El general, en tanto, señaló que el coronel “no llamó”, y que las armas son de él y del conductor con el que viaja.