El sector turístico de Chile ha sido golpeado por la noticia del cierre repentino de Novojet, un operador turístico emblemático que ha estado en funcionamiento durante 45 años. El anuncio, que se hizo efectivo el 1 de mayo, ha dejado a decenas de agencias de viaje en una situación de incertidumbre y a cientos de pasajeros, incluyendo adultos mayores, con viajes cancelados y sin reembolso.
El detonante de esta crisis fue la pérdida de la licitación del programa Viajes Tercera Edad (VTE), del Servicio Nacional de Turismo (Sernatur), que Novojet había mantenido durante más de dos décadas. Además, la empresa enfrentaba deudas pendientes con el Gobierno Regional de Valparaíso por alojamientos proporcionados a los afectados por los incendios de febrero de este año.
La noticia tomó por sorpresa a los colaboradores de Novojet, quienes se enteraron a través de un comunicado en la página web de la empresa, sin previo aviso. Incluso hasta el día anterior, la plataforma seguía permitiendo la reserva de viajes.
Las consecuencias inmediatas han sido devastadoras: alrededor de 80 agencias de viaje afectadas, más de 600 pasajeros con viajes cancelados y todos los empleados de Novojet despedidos. Además, los dueños de las agencias se han visto obligados a lidiar con los reclamos de los clientes, quienes habían planificado y pagado viajes para los próximos meses.
Las cifras de las deudas pendientes son alarmantes. Desde Turismo Maipú reportan pérdidas de hasta $12 millones de pesos, mientras que La Serena Turismo y At Travel Chile enfrentan deudas por $1.547.000 y $13.640.088, respectivamente. Estos montos fueron pagados por los pasajeros a las cuentas de Novojet, con las agencias como intermediarias.
A pesar de las declaraciones del Gerente General de Novojet, Rafael Novoa, asegurando que están respondiendo a todas las consultas, las agencias han denunciado falta de respuesta formal por parte de la empresa, cuyo correo electrónico contacto@novojet.cl solo ha enviado respuestas automatizadas.
Este triste episodio recuerda al cierre controversial del turoperador ITSE en 2022, que dejó a múltiples agentes de viaje con pagos pendientes y sin comunicación oficial por parte de la empresa.
El futuro de Novojet y el destino de sus activos dependen ahora de un liquidador que será designado por los tribunales. Mientras tanto, las agencias de viaje afectadas enfrentan el desafío de reconstruir su reputación y reembolsar a sus clientes, en medio de una crisis que ha sacudido profundamente al sector turístico chileno.